LAS CASUALIDADES NO EXISTEN

Es probable que existan fuerzas ocultas que desencadenen durante los rodajes efectos sobre los actores y sobre el equipo técnico que les haga incluso morir tras el rodaje, películas míticas como Poltergeist o La Profecía desencadenaron una serie de sucesos cerca de lo paranormal, que acabaron con algunos de los actores o miembros de los equipos muertos o gravemente heridos.

Todos hemos escuchado alguna vez, con más o menos credulidad o escepticismo, determinadas historias en torno a ciertas películas, generalmente afines a la temática paranormal y al satanismo, que se han visto empañadas por supuestas maldiciones. El Exorcista, Poltergeist, El Cuervo… son algunas de las películas en cuyo rodaje se habrían producido accidentes sin explicación, fenómenos extraños, muertes misteriosas… ¿Son tan solo rumores extendidos por la propias productoras cinematográficas en su intento de promocionar la película o, por el contrario, existe alguna evidencia real?

VAMOS A EXPONER VARIOS CASOS:

POLTERGEIST (1982):

Steven y Diane Freeling viven una vida tranquila en una comunidad planificada de California llamada Cuesta Verde, donde Steven es un exitoso promotor inmobiliario y Diane es una ama de casa que cuida de sus hijos Dana, Robbie, y Carol Anne. Carol Anne despierta una noche y comienza a conversar con el televisor de la familia, que está transmitiendo estática después de un cierre de sesión. La siguiente noche, mientras los Freelings duermen, Carol Anne se fija en el aparato de televisión que transmite la electricidad estática. De repente, un ser maligno se ve en la pantalla de la televisión y se desvanece en la pared, lo que provocó un violento terremoto en el proceso. Cuando el terremoto acaba, Carol Anne anuncia «Ya están aquí«.

Esta película acuñaría el término «maldición Poltergeist» para referirse a los accidentes y muertes que, por su frecuencia, se precipitan durante el rodaje o estreno de una película. En su génesis contribuyeron dos factores: que el argumento de la película girara en torno a fenómenos paranormales y la repentina muerte y a edad tan temprana de su protagonista, que interpretaba a Carol Anne, la tierna niñita de ojos azules con facultades mediúmnicas que, en lugar de jugar con muñequitas como las niñas de su edad, se entretiene comunicándose con los espíritus: «Ya están aquí…».

En un principio, su productor Steven Spielberg pensó en Shirley MacLaine, para interpretar a la madre de Carol Anne. Sin embargo, como si «intuyera» «malas vibraciones», la actriz renunció al papel alegando que: «Poltergeist era demasiado violenta para mí. Explotaba el lado negativo de la Fuerza y no quise contribuir a esa violencia negativa en el mercado». Así fue como, gracias a sus excéntricas inquietudes espirituales, Shirley MacLaine se libró de la maldición que afectó a los siguientes actores:

Dominique Dunne (1959 – 1982), que interpretaba a la hermana mayor de Carol Anne, murió el 4 de noviembre de 1982 tras un coma cerebral después de que cinco días antes fuera estrangulada por su ex pareja, John Thomas Sweeney -quien condenado a seis años, quedó en libertad antes de cumplir la mitad de su condena-.

Julian Beck (1925 – 1985), el reverendo Kane en Poltergeist II, falleció de cáncer – que ya padecía durante el rodaje- el 14 de septiembre de 1985.

Will Sampson (1933-1987), actor amerindio que representaba al chamán Taylor, fallecía el 3 de junio de 1987 por insuficiencia renal tras sufrir un trasplante de corazón y pulmón. Sampson padecía una enfermedad degenerativa autoinmune (esclerodermia).

Heather O’Rourke (1975-1988), que interpretó a la niña Carol Anne, falleció el 1 de febrero de 1988 -durante la post-producción de Poltergeist III- por un paro cardiaco debido a una obstrucción intestinal consecuencia de una enfermedad diarreica contraída un año antes y que estaba tratando con cortisona (de ahí la evidente hinchazón de sus mejillas en la película). Según el diagnóstico médico, este estrechamiento intestinal era congénito, agravándose con una infección, con tal fatídico desenlace. Su repentina muerte popularizó en la cultura popular el concepto de «películas malditas» que, más tarde, se extendiera a otros títulos.

La «maldición Poltergeist» se ha atribuido a que la productora de Spielberg se había construido profanando un cementerio indio… Sin embargo, se trata de una leyenda urbana. Lo mismo que la maldición, que hilvana una cadena de muertes… que eran perfectamente previsibles: hacía tiempo que Dominique Dunne era víctima de violencia de género, mientras el resto de intérpretes padecían de enfermedades congénitas. Parece que el tabloide sensacionalista Nationa Enquier fue el primero en cimentar esta leyenda urbana al atribuir la muerte de la pequeña Heather a causas sobrenaturales.

EL EXORCISTA (1973):

LAS MALDICIONES DE UNA OBRA MAESTRA DEL CINE DE TERROR.

La casa real donde se rodo «El Exorcista» está situada al oeste de Washintong, capital de los Estados Unidos, es una construcción de ladrillos, de estilo victoriano, que posee un pequeño jardín. La casa está ubicada en el número 3,600 de Prospect Street Northwest. En muy habitual encontrarse con turistas fotografiando la fachada o la empinada escalera que comunica con la calle.

La casa, rodeada por el rio Potomac, es el lugar donde se rodo, en 1973, la icónica película de terror «El Exorcista». Sin embargo, es importante saber que todas las escenas del interior se rodaron en los estudios cinematográficos de Nueva York. Esto es porque el director quería cosas muy específicas que no encontró en ningún lado.

Fue la primera película de terror en ser nominada a los Oscar -inaugurando un nuevo género como es el «cine satánico»- no podía prescindir de su oportuna leyenda de «película maldita» generadora de extraños accidentes y muertes misteriosas. Como es sabido, el film es una adaptación de la novela homónima de W. P. Blatty (1928 – 2017), que se inspira en los sucesos reales protagonizados por un niño del estado de Maryland que, en 1949, había manifestado un carácter lo suficientemente travieso como para que su familia lo atribuyese a una posesión diabólica. Los nueve meses que duró el rodaje supusieron un auténtico clavario para actores y equipo técnico….

TE DEJO A CONTINUACIÓN UNA SERIE DE SUCESOS ACONTECIDOS DURANTE Y DESPUÉS DEL RODAJE DE LA MÍTICA PELÍCULA:

Axel Ulrik Bertil von Sydow (1907 – 1972), hermano del actor Max Von Sydonw (Padre Merrin), fallecia el 23 de noviembre de 1972 en Estocolmo (Suecia) cuando se iniciaba el rodaje del film.

Jack MacGowran (1918 – 1973), actor irlandés de cincuenta y cuatro años, que interpretaba el personaje de Burke Dennigs, el director alcohólico cuyo cadáver es encontrado por la policía en las escaleras -supuestamente precipitado por la niña poseida-; murió el 31 de enero de 2973, cuatro semanas después de finalizar el rodaje, como consecuencia de una gripe contraída en Londres.

Vasiliki Mliaros (1883 – 1973), quien interpreta (en su único papel como actriz) a la madre del Padre Karras, falleció el 9 de febrero de 1973.

Se dice que el hijo de Jason Miller (1939 – 2001) -el Padre Karras-, Jordan Miller, de cinco años, estuvo apunto de morir atropellado por una motocicleta en la playa.

Otra muertes y accidentes fueron las del abuelo de Linda Blair -la niña protagonista-, el recién nacido de un asistente de cámara, un operario del sistema de aire acondicionado, el conserje de uno de los platós de rodaje que habría sido asesinado… Así hasta un total de nueve muertes. También se dijo que los rollos de película aparecían velados sin explicación, mientras se sucedían aparatosos accidentes.

La pregunta es la siguiente: ¿se desencadenaron durante el rodaje de «El Exorcista» fuerzas diabólicas que expliquen esta cadena de infortunios?. La exageración y el sensacionalismo parecen estar detrás de esta leyenda urbana. Fue el propio director W. Friedkin (1935) quien, irónicamente, había atribuido a fuerzas sobre naturales el retraso del rodaje de la película. La prensa interpretó literalmente estas palabras y recogió el testimonio de Ellen Burstyn (1932), que interpretaba a la madre de la niña poseída, la que insinuó -probablemente por una estrategia comercial- que estas muertes podrían vincularse con una «maldición». Aunque desde luego, habría resultado mucho más «sobrenatural» que la actriz Vasiliki Mliaros, fallecida con 90 años hubiera sobrevivido al film… asimismo, si los pretendidos accidentes como el que supuestamente tuvo el hijo de Jason Miller se hubieran relacionado con su intervención en la película, probablemente este no habría participado en una de las secuelas…

LA PROFECIA (1976) Título original (The Omen)

Película protagonizada por Gregory Peck y Lee Remick como actores principales,  es una película de terror britanoestadounidense dirigida por Richard Donner. El tema musical es Ave Satani, de Jerry Goldsmith, quién ganó su único Oscar de la Academia por su trabajo en la banda sonora.

En la estela comercial inaugurada por El Exorcista se sitúa La Profecía, que no podía esquivar la popularidad que le concedería convertirse en una de las películas más malditas en la historia del cine. Estos son algunos de los dramáticos sucesos que el equipo de producción no se cansa de relatar para convencernos de que fuerzas sobrenaturales se desataron durante el rodaje…

El hijo mayor de Gregory Peck, Jonathan Peck (1944 – 1975) se suicida pegándose un tiro el 26 de junio de 1975.

Los aviones parecieron ser objeto de una maldición. El avión en el que viajaba Gregory Peck de Los Ángeles a Londres fue alcanzado por un rayo. Lo mismo le ocurrió al guionista David Seltzer (1940) cuando viajaba en la misma ruta aérea. Un vuelo a Israel, cancelado a última hora por Gregory Peck, se estrelló matando a todos sus pasajeros. El jet privado que iba a ser usado por el equipo técnico tuvo un aparatoso accidente antes de despegar, colisionando contra un vehículo en el que viajaban la esposa y los hijos del piloto.

El hotel Hilton de Londres, donde se hospedaban el director Richard Donner (1930) y el productor ejecutivo Mace Neufeld (1928) sufrió un atentado terrorista el 5 de septiembre de 1975, muriendo dos personas y dejando 63 heridos. Lo mismo ocurrió en el restaurante y en la estación de Metro en la que ambos se encontraban a corta distancia.

Un guardián del Safari Park de Windsor (Inglaterra), donde se grabó la escena de los monos babuinos, murió devorado por los tigres (y no por leones, como se dijo en su momento).

John Richardson (1946), supervisor de efectos especiales que diseñó la famosa escena en la que uno de los protagonistas (el fotógrafo que acompaña al embajador, padre adoptivo del Anticristo) muere decapitado, protagoniza un fatal accidente de tráfico en los Países Bajos. Su pareja Liz Moore (1944 – 1976) -también especialista en efectos especiales- murió en el siniestro, al parecer decapitada, un viernes 13 de agosto… Se dice que el accidente tuvo lugar a 66,6 Kilómetros de la localidad de Ommen.

El relato de estos sucesos ha servido para continuar promocionando la película durante todos estos años. Sin embargo, la conexión entre estos hechos y una posible maldición resulta, cuando menos, arbitraria. La muerte del hijo de Gregory Peck sucedió antes -y no después- del rodaje de la película.

En cuanto a los vuelos alcanzados por rayos se trata de algo relativamente frecuente: 300 (de los 200.000) vuelos diarios sufren el impacto de un rayo. el resto de accidentes no afecta al equipo técnico de la película, sino a personas completamente ajenas, por lo que no pueden atribuirse a ningún «castigo» de fuerzas sobrenaturales por haber rodado la película. En cuanto a los atentados, ninguno de ellos tuvo consecuencias fatales para los artífices del film, y deben contextualizarse en la campaña de acciones sangrientas desplegadas en Londres en 1975 por la organización terrorista IRA.